Obsesivo en algunos aspectos nada confesables | Patricio Tapia

Patricio Tapia (Chile, 1968) periodista y escritor especializado en vinos, conocido por sus guías y libros, así como por su trabajo de columnista de revistas especializadas de Chile y el extranjero. Trabaja para el periódico chileno El Mercurio como columnista estable de la revista Wikén, y a nivel internacional es editor asociado de Wine & Spirits Magazine con sede en Nueva York. Desde el año 2004 forma parte del canal de televisión El Gourmet Es autor de Descorchados, una de las guías de vinos más importante en la que se incluyen las principales viñas de Chile, Argentina, Uruguay y Brasil

Un sabor de la infancia
Más que un sabor, lo que me lleva a la infancia es un aroma, el de las mandarinas. La cosecha de invierno de un árbol de mandarinas que alguna vez hubo en el patio trasero de la casa de mis abuelos.

Una manía confesable
Obsesivo en algunos aspectos nada confesables.

Un amuleto
Hace por lo menos 30 años que ando con un dólar, el mismo, en la billetera.

El último libro que leí
No fue el último, pero sí el último que realmente me apretó el estómago: Primera Luz, de Charles Baxter. Un tremendo ejercicio de estructura narrativa, de construccion de una historia, pero a la vez un libro que te llega a los huesos.

Una película que me marcó
La Delgada Línea Roja, de Malick. La he visto muchas veces. Hubo un tiempo, incluso, en que la veía en la madrugada del Año Nuevo, como rito. La Delgada Línea Roja marca el punto culminante de Malick. Creo que de ahí en adelante, su cine se fue lentamente al carajo.

Algo que evito
La gente tóxica.

Si pudiera volver a empezar sería
Arquitecto. Admiro eso de idear formas y de situarlas en un espacio. Admiro ese talento que puede, de hecho, aplicarse a muchas cosas.

Un lugar para vivir
Galicia, junto a las rías, comiendo empanadas rellenas de sardinas, tomando caiño. O bien, en Sanlúcar, comiendo pescaítos fritos y tomando manzanilla.

Un lugar para volver
Siempre Barolo. Creo que no he comido ni bebido tan bien en mi vida como allí.

Una materia pendiente
Uf! Muchas.

Un acontecimiento que cambió mi vida
El nacimiento de mis dos hijas.

El escritor definitivo
Richard Yates. “No pierdas tiempo en la prosa. Concéntrate en la estructura.” Decía. ¡Vaya consejo!

Algo que jamás usaría
Una lapicera. La perdería en un segundo. Plata a la basura.

La última vez que pensé “tierra, trágame”
Sensación frecuente cuando me pasan una copa de vino y me preguntan, sin darme pista alguna, ¿Qué es?

El lugar más feo del mundo
Donde sea que haya miseria.

Una rutina placentera.
La siesta.

Me aburre
La obviedad.

Una extravagancia gastronómica que frecuento.
Me gustan los piures, una especie de mutante marino, indefinible tanto en forma como en sabor. Crudos, con cebolla, perejil y limón. Si comes muchos, tienen un efecto levemente alucinógeno. Raros animales esos.

Una canción que aún me conmueve
Heartbeat (Tainai Kaiki II) con David Sylvian en voz y Ryuchi Sakamoto al piano.

Un restaurante que nunca falla
En Uruguay yo soy fan de Leonardo Etxea. Pasión por el mar ahí. Cuando vayan, pidan miniaturas de sargo. Las kokotxas, cuando tiene, son deliciosas.

Algo que cambiaría si pudiera
El clima.

El valor humano que más admiro
La perseverancia.

Una última palabra
Me dieron ganas de comer miniaturas.

Fotografía: Prensario del vino