La primera vez que supe de Selva Casal fue en el documental Entre orillas, que Bárbara Meyer y Concha García dirigieron en 2015 y en el que se entrevista a seis poetas de Uruguay y Argentina. Así, además de la citada poeta de Montevideo, también aparecen Circe Maia (en Tacuarembó), Graciela Cros (en Bariloche, argentina como las siguientes), Diana Bellesi (El Tigre), María del Carmen Colombo (Buenos Aires) y Nini Bernardelo (Isla de Tierra de Fuego).
Selva Casal es la primera en aparecer en el documental y, desde el principio, nos apunta qué rasgos ha de tener la poesía para ella: «Pienso que sin intensidad y sin profundidad la poesía naufraga, es muy importante la emoción […]. También es poesía abrir una puerta, aparte de que a veces existen muchas mesas redondas, muchas academias, muchos estudios. La poesía huye de todo eso». Así, gracias a sus propias palabras, conocemos mejor de su estilo y motivación poética: «La infancia sustenta la poesía, porque es permitido vivir un poco la locura, pero luego en el transcurso del vivir se va enriqueciendo y desgastando a la vez por los estados de conciencia, por las situaciones límite que alcanza a todos por no saber si lo que se hace tiene algún sentido».
Ser mortales nos ciega de tal forma
queremos hacer tanto
antes que se termine
deberíamos saberlo
pero alguien a nuestro oído habla y nos induce
a ir devorando días como peces
sobre manteles limpios
a decir buenos días señores buenas tardes
siento una inquietud que mata
un temblor que enloquece
un querer abrazar a mano armada
un amar a destiempo […]
Si no fuera por la poeta española Concha García, a Selva Casal se le conocería menos en España. Ella contaba que el primer contacto con la poesía de la uruguaya fue cuando compró en Barcelona Han asesinado al viento; varios años después, a mediados de la primera década de este siglo XXI, ambas se conocerían en Montevideo y conectarían poéticamente. De este modo, Concha García preparó para el mercado español la antología Y lo peor es que sobrevivimos en 2013 y realizaría uno de las mejores revelaciones sobre su estilo poético: «Cada verso late como parte de una oración exorcizando, mediante la palabra, la infinita capacidad de destrucción del ser humano en una vivencia paralela entre el sueño y la vida cotidiana».
Y lo peor es que sobrevivimos
sobrevivimos siempre
al amor a la ruina
a la incesante sorpresa de la muerte
avanzo ante despojos
y sé que lo terribles que volvemos a ser felices.
Entristece que la poeta se haya marchado, pero nos dejó un buen número de libros de poemas en los que nos podremos reencontrar con ella. «Desde lo hondo de mi corazón vacilo / entre quedarme o irme o recoger pedazos de mi vida», dice en uno de ellos. Al igual que ella, hemos de sorprendernos de estar vivos.
Manuel Guerrero Cabrera (Lucena, España, 1980) es profesor de lengua y literatura, articulista y poeta. Desde la Asociación Cultural Naufragio, lleva a cabo una labor de difusión cultural y literaria en el sur de Córdoba. Trabaja en radio y publica en varios medios. Tiene varios libros de poesía y ensayo publicados. Esta es la primera colaboración especial para Delicatessen.uy, que agradecemos infitintamente.