Eduardo Boido (Montevideo, 1966) es enólogo, ingeniero químico y doctor en Química. Es el responsable técnico del proyecto Bodega Bouza, empresa en la cual se desempeña como director y enólogo. Es profesor adjunto del área de Biotecnología de las Fermentaciones, en el departamento de Ciencia y Tecnología de Alimentos de la Facultad de Química. También es profesor en la Escuela de Vitivinicultura (UTU) e investigador grado 4 en PEDECIBA y nivel II en el Sistema Nacional de Investigadores (ANII). Es responsable o integrante de equipo en la ejecución de más de 20 proyectos sobre caracterización de uvas y vinos, y modificaciones durante la vinificación. También es coautor de más de sesenta publicaciones en revistas con referato y de cinco capítulos en libros. Tiene a sus espaldas más de 150 conferencias como expositor y conferenciante.
Un sabor de la infancia
Siempre me acuerdo de las ciruelas amarillas cuando las comía del árbol.
Una manía confesable
Tener todo muy ordenado, incluso por ejemplo mantener bien alineada la mesita con el sillón. A veces creo que soy un poco obsesivo con esas cosas.
Un amuleto
Cuando estudiaba siempre llevaba unas figuritas de la Pantera Rosa a los exámenes y me iba bien, ¡aunque parezca increíble!
El último libro que leí
En busca de las leyes del pensamiento de Eduardo Mizraji.
Una película que me marcó
Una película que recuerdo es Matrix.
Algo que evito
Discusiones no necesarias.
Si pudiera volver a empezar sería
Seguro que enólogo
Un lugar para vivir
Me gusta donde vivo, en Malvín. Pero necesito pasar parte del día en un lugar abierto y por suerte mi trabajo me ayuda, ya que siempre estoy varias horas en el viñedo y la bodega.
Un lugar para volver
Bordeaux, por suerte fui varias veces pero siempre me gusta volver.
Una materia pendiente
¡Practicar algún deporte!
Un acontecimiento que cambió mi vida
No tengo un acontecimiento tan decisivo, creo que fui cambiando de a poco a lo largo de mi vida.
El escritor definitivo
Borges.
Algo que jamás usaría
Ropa con muchos colores, no se por qué, pero no me siento cómodo.
La última vez que pensé “tierra, trágame”
Paso.
El lugar más feo del mundo
Uyyy, no ea viajado tanto, algunos lugares me han gustado un poco menos pero no tengo ningún lugar como el más feo.
Una rutina placentera
Ordenar sellos en mi colección (¡soy filatelista!).
Me aburre
No me gustan nada las esperas para algunos trámites y me aburren mucho, siempre evito esas tareas.
Una extravagancia gastronómica que frecuento
El flan con dulce de leche, ¡lo frecuento mucho!!
Una canción que aún me conmueve
Y bueno, son aquellas que escuchábamos cuando estudiaba en el liceo hace mucho tiempo, por ejemplo “Dust in the wind” de Kansas.
Un restaurante que nunca falla
No voy mucho a restaurantes, en general siempre hay cosas lindas y puede que alguna no tan buena, pero siempre disfruto, por supuesto por la comida y algún vino, pero fundamentalmente por la compañía.
Algo que cambiaría si pudiera
Las injusticias.
El valor humano que más admiro.
La tolerancia.
Una última palabra
Chau.
