Las mil y una formas de disfrutar un producto regalo de la naturaleza: ¡huevos! | Sylvana Cabrera

Diferentes formas de cocción

Algo tan simple en apariencia, ha sido el talón de Aquiles de muchos profesionales. Te damos algunos consejos para lograr el punto de cocción deseado. Lo primero que debemos tener en cuenta es utilizar huevos siempre frescos!!!

Una de las formas es mirando detenidamente su cáscara, si ésta es opaca y áspera al tacto, el huevo está en condiciones de ser utilizado.

Cuando la cáscara es suave y brillosa significa que el huevo no es fresco.

Otra forma es colocando el huevo en un recipiente con agua y sal gruesa.

Si el huevo va hacia el fondo es que está fresco, si flota a media altura todavía se puede usar, pero si queda flotando en la superficie… hay que desecharlo.

Pero los trucos de entrecasa siguen y otra manera de comprobar su estado es agitando un poco el huevo cerca del oído, si se siente movimiento hay que tirarlo.

Los huevos deben conservarse en la heladera y para utilizarlos en cualquier preparación, retirarlos siempre con tiempo para que tomen temperatura ambiente.

Huevos poché

Para hacer los huevos poché se emplea una sartén o cacerola profunda a la en la que colocamos 4 a 5 centímetros de agua y una cucharada de vinagre blanco por litro de agua.

Llevar a punto de hervor y luego bajar el fuego para mantener caliente el agua. Romper el huevo en un platito y volcarlo en el agua.

Cocinarlo
a fuego lento y con una cuchara tratar de que la clara tape la yema. Dejarlo 2 o 3 minutos, luego con ayuda de una espumadera sacarlo y sumergirlo en agua fría, pero solo un instante. Lo más conveniente es prepararlos de a uno. También se pueden envolver en forma de caramelo en un nylon film y sumergirlos en el agua hirviendo ese mismo tiempo.

Servirlos acompañados de una tostada de pan casero lo convierten en un bocado irresistible. Se pueden además servir con unas fetas de jamón crudo, jamón cocido del bueno!!, bresaola o salmón ahumado.

Huevos moldeados

Para los huevos moldeados se emplean moldes individuales de flan bien enmantecados. Se vierte un huevo dentro de cada molde y se cocinan siempre a baño de María en hornalla o en el horno precalentado durante 6 a 7 minutos. Están prontos cuando la clara queda firme y la yema cremosa.

Si se sirven calientes se desmoldan de inmediato, pero lo ideal es esperar unos minutos antes de servir para que no se rompan. En el momento de colocarlos en los moldecitos se aconseja salpimentarlos y si les gusta se pueden espolvorear con hierbas frescas o secas. Me encantan con un toque de sal y de eneldo seco. El curry o el tandoori le dan un sabor especial y delicado. Ideales para acompañar con unas hojas verdes y servirlos como entrada o como acompañamiento de vegetales, carnes o pescados.

Huevos duros cremosos

Esta forma de cocimiento requiere prepararlos en el momento de ser consumidos. Para que los huevos duros resulten cremosos se deben cocinar durante 10 minutos en agua caliente, pero sin que llegue a soltar el hervor!!!

Huevos mollet

Los huevos mollet se sumergen
en agua hirviendo dejándolo 4 o 5 minutos a partir del hervor, luego
se retiran y se pasan por agua fría. Pelarlos con cuidado pues al ser blandos se rompen con facilidad. Se sirven tanto fríos como calientes. Ideales para comer sobre una crujiente tostada de pan de campo.