Historias venenosas | Omar López Mato
En abril de 1581 el joven Wendel Thumblardt tenía los días contados, había sido condenado a muerte por una sucesión de robos que cometió en el pueblo de Honenhall. Casi con la cuerda al cuello, Wendell decidió sortear su suerte nefasta, y se ofreció como conejillo de indias para probar un antídoto que recién se conocía en Alemania. Se llamaba terra sigillata y en realidad era un remedio que se