Evito responderle a los enemigos | Mario Delgado Aparaín

Mario Delgado Aparaín (La Macana, Florida, 1949) es escritor, docente, periodista y gestor cultural. Algunos de sus libros de cuentos: Las llaves de Francia (1981), Causa de buena muerte (1982), Querido Charles Atlas, La leyenda del Fabulosísimo Cappi y otras historias (1999), El canto de la corvina negra (2003) y La taberna del loro en el hombro (2005). Entre sus novelas, se cuentan: Estado de gracia (1983), El día del cometa (1985), La balada de Johnny Sosa (1987, Primer Premio Municipal de Literatura de Montevideo), Por mandato de madre (1996, Premio Foglia de Novela), Alivio de luto (finalista del Premio Internacional Alfaguara y del Premio Rómulo Gallegos 1998), No robarás las botas de los muertos (Premio «Bartolomé Hidalgo» de la Feria Internacional del Libro de Montevideo, 2003) y Los peores cuentos de los hermanos Grim (2005), en coautoría con el escritor chileno Luis Sepúlveda y Los ocho magníficos (2018). En el año 2002, recibió el Premio Instituto Cervantes del Concurso «Juan Rulfo» de Radio Francia Internacional, por el cuento Terribles ojos verdes. En el año 2010 publicó el libro de relatos Vagabundo y errante – Peripecias de Pedro P. Pereira, ya en su quinta edición. En 2013 publicó la novela El hombre de Bruselas, recientemente traducida en Italia. A fines de 2013, reúne por primera vez todos sus relatos en un solo libro, Un mundo de cuentos, publicado por Editorial Planeta. Sus obras han sido traducidas a varios idiomas. Coordina un taller de escritura literaria y condujo el programa de entrevistas culturales Café negro en TV Ciudad.

 

Un sabor de la infancia
El dulce de higos.

Una manía confesable
Inventar respuestas.

Un amuleto
La calavera de Piper, mi primer perro, eternamente a mi lado.

El último libro que leí
El vendedor de pasados, del angolano José Eduardo Agualusa.

Una película que me marcó
Los puentes de Madison, “No quiero necesitarte, porque no puedo tenerte” (Clint Eastwood a Meryl Streep).

Algo que evito
Responderle a los enemigos.

Si pudiera volver a empezar sería
Criador de caballos.

Un lugar para vivir
Minas.

Un lugar para volver
Gijón, Asturias.

Una materia pendiente
Enamorarme.

Un acontecimiento que cambió mi vida
El cáncer.

El escritor definitivo
José Saramago.

Algo que jamás usaría
Lentes negros.

La última vez que pensé “tierra, trágame”
En la Intendencia de Montevideo, cuando el Príncipe de Asturias, actual rey de España, me tendió la mano y me dijo “Mucho gusto, el Príncipe de Asturias” y yo le respondí “Encantado, el Conde de Caraguatá”.

El lugar más feo del mundo
Asunción.

Una rutina placentera
Tomar mate de madrugada.

Me aburre
Escuchar hablar mal de los demás.

Una extravagancia gastronómica que frecuento
El bife de hígado encebollado con huevo frito, con boñato y papa hervida, con aceite de oliva y perejil.

Una canción que aún me conmueve
Minha historia, de Chico Buarque, cantada por Chico y por Alfredo Zitarrosa.

Un restaurante que nunca falla
El telurio, en Gral. Flores y Lamas.

Algo que cambiaría si pudiera
La pobreza en nuestra gente.

El valor humano que más admiro
La solidaridad.

Una última palabra
Mi amiga.

 

Foto de Daniel Mordsinsky.