Almorzando con Renoir | Sylvana Cabrera

Imagen: Wikipedia commons

Luego de visitar la casa de Renoir en Cagnes sur Mer como les contaba en la entrega anterior y siguiendo las huellas de este fascinante pintor impresionista, sentí mucha curiosidad por almorzar en el restaurante Maison Fournais a orillas del Sena. Las obras de algunos pintores me han llamado, desde siempre, la atención y el “Almuerzo de remeros” pintado por Renoir en 1881, no ha sido la excepción.

Muchas veces buscaba las vinculaciones reales de las pinturas, con la vida misma de sus creadores. Un artista como Renoir es de hecho, una fiesta para curiosos como yo, debido a que la mayoría de sus obras tienen rostros que han sido identificados.

El cuadro muestra un grupo de amigos de Renoir descansando tras la jornada de remo en el Sena, en una terraza de un restaurante, que es sobre el cual es nuestro actual relato.

El túnel del tiempo

En los alrededores de París y en un entorno muy distendido y alejado del mundanal ruido parisino, este reducto culinario sedujo a muchos artistas de la época. La reconocida Maison Fournaise situada en el turístico pueblecito Chatou, constituía junto al cercano embarcadero de la Grenouillére, un lugar muy frecuentado por el grupo impresionista. No en vano a la islita del Sena donde se ubica, se la llama “Isla de los Impresionistas”. Fournaise es un restaurante y museo al oeste de París, al cual llegamos luego de un trayecto que duró más de una hora desde el Barrio Latino.

En un entorno muy relajado y muy verde, la Maison Fournaise permaneció abandonado por años. La iniciativa de amantes de las artes, hicieron posible su reapertura en 1990.

Almorzando con Renoir y sus amigos

Con una aire bucólico, este restaurante recrea la cocina clásica francesa. Su oferta y la presentación de sus platos es el reflejo de una gastronomía más asociada con la nouvelle cuisine, que con la cocina actual francesa. La sensación de estar en esa misma terraza, nos permite viajar en el tiempo e imaginar a los personajes de esta obra, disfrutar de un hermoso día de sol a orillas del Sena. El servicio es correcto, la comida no tiene las pinceladas de color de la obra, pero no defrauda.

Probamos una ensalada de espárragos con lascas de parmesano y unos dados de foie gras. De plato principal, un clásico de la casa, el Rôti d`Agneau cocido en el punto solicitado y una brochette de ternera en salsa de champagne. De postre, una tarteleta de mousse de chocolate amargo con coulis de naranja y las bebidas fueron agua mineral y una copa de vino de un Borgoña recomendado. El precio por este almuerzo para dos comensales, fue de 54 euros. Tal vez no haya sido un almuerzo memorable desde el punto de vista gastronómico, pero el hecho de estar en ese lugar, hace de ese día, un momento imposible de olvidar.

Texto que tomamos prestado… https://almargendefermat.wordpress.com/tag/renoir

Los personajes

«Dominando totalmente los gestos y expresiones, Renoir pintó retratos juveniles e idealizados de sus amigos y colegas que frecuentaban la Maison Fournaise:

En el fondo y llevando un sombrero de copa vemos al adinerado Charles Ephrussi (nº 8), un coleccionista, y editor de la Gazette des Beaux-Arts, hablando con un hombre joven que lleva una chaqueta marrón más informal y gorra, que podría ser Jules Laforgue (nº 5), el poeta, crítico y secretario de Ephrussi.

En el centro aparece el actriz Ellen Andrée (nº 6) bebiendo de un vaso mientras nos dirige una melancólica mirada.

Sentado enfrente de Ellen y dándonos la espalda está el Barón Raoul Barbier (nº 4), el antiguo alcalde del Saigon colonial, divirtiendo con su conversación a la joven Alphonsine Fournaise (nº 3), la hija del propietario.

Llevan los tradicionales sombreros de paja de remero tanto ella como el personaje que se encuentra de pie a la izquierda, Alphonse Fournaise (nº 2), dueño del restaurante y que se une también a la sobremesa mezclándose con sus clientes, pero manteniéndose algo al margen.

Al fondo aparecen el artista Paul Lhote (nº 12) y el burócrata Eugène Pierre Lestringez (nº 11). Amigos íntimos de Renoir, parecen estar coqueteando con la elegantemente vestida Jeanne Samary (nº 13), famosa actriz de la “Comédie Française”.

Lhote no es el único artista representado en el “Almuerzo de los remeros”; Renoir también incluye un retrato juvenil de su amigo Gustave Caillebotte (nº 9). Pintor y mecenas del propio Renoir, está sentado a horcajadas en primer plano, junto a la actriz Angèle (nº 7) y el periodista italiano Maggiolo (nº 10). Pero a quien en realidad mira Caillebotte es a la encantadora mujer de la izquierda, Aline Charigot (nº 1), la futura mujer de Renoir, que está jugando cariñosamente con el perrito. En su retrato se aprecia perfectamente el afecto que le tenía Renoir.»

Restaurant Maison Fournaise
Abierto todos los días del año
3, rue du Bac – 78400 Chatou, 78400 Chatou
Francia