La gente que no suma, solo sabe restar | Marga Fuentes

Marga Fuentes, uruguaya, radicada desde hace muchos años en España. Integró, junto a su hermana, el mítico dúo Marga & Betty, a fines de la década del 60, que brillaba en Discodromo Show. Cuando Delicatessen.uy le preguntó cómo presentarla, respondió: «Buena pregunta!!! La de aquel dúo ya no va más. La osteópata que se jubiló, no me parece bien. La hermana del obispo de Minas, tampoco. Soy Marga Fuentes. El que no me recuerde o el que no me conozca, no importa. Soy también la tía de Stefanie Neukirch. ¿No lo sabías? Su madre y yo, somos hermanas desde los 14 años.»

 

Un sabor de la infancia
La yema de huevo batida con azúcar y vino garnacha que me hacía mi abuela.

Una manía confesable
El orden y la limpieza.

Un amuleto
No tengo.

El último libro que leí
Todo esto te daré, de Dolores Redondo.

Una película que me marcó
La otra cara del amor.

Algo que evito
Los conflictos.

Si pudiera volver a empezar sería
En Montevideo, sin duda.

Un lugar para vivir
El campo con montaña alrededor.

Un lugar para volver
París.

Una materia pendiente
La carrera de canto lírico.

Un acontecimiento que cambió mi vida
La muerte de mi hermano Carlos y mi amigo Román Iturburúa, pianista cantante uruguayo.

El escritor definitivo
Stephen Zweight. He leído casi toda su obra. Me maravilla la sensibilidad que tenía. De qué forma conocía el sentimiento de la mujer.

Algo que jamás usaría
Una prenda de color rojo.

La última vez que pensé “tierra, trágame”
No lo puedo decir porque volvería a meter la pata.

El lugar más feo del mundo
Villaviciosa de Odón.

Una rutina placentera
Caminar diariamente por el campo con mi perra.

Me aburre
La gente que no suma. Sólo sabe restar.

Una extravagancia gastronómica que frecuento
Salmón al horno, salmón ahumado, salmón en ensalada, con alcaparras.

Una canción que aún me conmueve
«Qué pena», de Zitarrosa.

Un restaurante que nunca falla
La Dorada, en Madrid.

Algo que cambiaría si pudiera
El gobierno de España.

El valor humano que más admiro
El compromiso, la honestidad, la integridad.

Una última palabra
«La verdad, tiene un tono y un clima, imposibles de confundir». Juana de Ibarbourou.