Olivos, una agroindustria que se consolida en Uruguay | Darwin Marigliani


Con más de 10.000 hectáreas plantadas, un crecimiento de 800 hectáreas por año, 20 plantas procesadoras (Almazaras) en distintas regiones del Uruguay y más de 40 marcas que envasan Aceite de Oliva Virgen Extra “Made in Uruguay”, el sector llegó para convertirse en una alternativa más de las plantaciones que el agro uruguayo nos ofrece.

Con empresas cuyas inversiones exceden los U$D 20.000.000 a cultivos familiares con un promedio de 5 hectáreas, la olivicultura genera mano de obra para 1.500 empleos directos y más otros 4.000 empleos zafrales aplicados a la cosecha. Su importancia en nuestro país, va más allá de estos números que cuantifican el sector y nos hablan de una producción de un Aceite de Oliva Virgen Extra que compite de igual a igual con los tradicionales y gigantes productores mundiales cómo pueden ser Italia, España, Chile, Australia, Sudáfrica, Grecia o USA, entre otros.

Nuestro pequeño país ha llamado la atención por la seriedad en el trabajo y la cadena productiva implementada que ha dado como resultado, aceites que compiten a nivel mundial ganando premios en certámenes de cata altamente renombrados. El sector debe aprovechar la ventaja de la contra estación que tiene frente a los productores del hemisferio norte, cuyos aceites jóvenes ingresan al mercado sobre setiembre/octubre, mientras que los producidos en nuestro país, se elaboran en marzo/abril.

Uno de los tantos respaldos recibidos por Uruguay, es la validación del Panel de Análisis Sensorial de la Facultad de Química de nuestro país, por parte del COI (Comité Oleícola Internacional), lo que lleva a que en el hemisferio sur haya sólo 2 paneles validados por el Comité que regula y ordena el sector, el uruguayo y un panel de Argentina.

Si bien el año 2016 tuvo una baja cosecha (producto de una primavera del 2015 muy húmeda, ventosa y lluviosa), los auspicios para la cosecha del 2017 son excelentes, habiendo explotado la floración en esta primavera en todas las plantaciones del país. Primer signo éste, que permite evaluar la cantidad de fruta que se obtendrá el próximo otoño. Por otra parte, se debe continuar trabajando en el desarrollo del conocimiento que tienen los consumidores uruguayos sobre las calidades de los aceites importados que ingresan a nuestro mercado.

Resaltar que un país con renombre de origen, no asegura la calidad del contenido de las botellas de Aceite de Oliva, catalogado cómo Virgen Extra en su etiqueta, y que se puedan adquirir, esto a la sombra de los múltiples problemas e irregularidades en el etiquetado que ya se han dado en años precedentes en el viejo continente, generando altas multas por esta infracción en reconocidas marcas.

El camino a seguir por los productores de aceite de oliva de nuestro país, es muy similar al recorrido por las bodegas uruguayas, las que con su trabajo y docencia aplicada en diferentes campañas de difusión,lograron que los consumidores de nuestro país sepan, conozcan y valoren la calidad de nuestros vinos en el momento de la decisión de compra, pudiendo optar por marcas nacionales frente a iguales productos importados de la misma.

Estas son las múltiples razones que nos han llevado a trabajar en la Segunda Edición de Sabor Oliva (Salón AOVE), único espacio dedicado al aceite de oliva virgen extra 100% uruguayo, que se llevará a cabo el 3 de noviembre en el Hotel Cottage. Sin dudas apostamos a la excelente calidad y a un sector que en pocos años dará mucho que hablar en nuestro país y en el exterior.

 

Darwin Marigliani es Sommelier de Aceite de Oliva y creador, junto con Sylvana Cabrera, del primer Salón del Aceite de Oliva Virgen Extra de Uruguay (Sabor Oliva).